Isabel Hernández, Ödön Von Horváth
Un hijo de nuestro tiempo
Nórdica Libros

Páginas: 170
Formato:
Peso: 0.275 kgs.
ISBN: 9788418067211

En Un hijo de nuestro tiempo Horváth se convierte en fiel cronista de su época. Es capaz de reproducir los usos del lenguaje fascista tanto a nivel militar como civil y de mostrarnos a través de ellos cómo el individuo de a pie adopta sin más los tonos por los que ya se ha dejado seducir. Si en Juventud sin Dios el maestro tenía una sensación ambivalente respecto a ello, el soldado de Un hijo de nuestro tiempo está entusiasmado con los usos del Estado fascista y habla siguiendo el modelo ideal de lenguaje tipificado por los nacionalsocialistas. Esta novela, escrita en 1937, es un brillante retrato de aquellas personas que durante años obedecieron, admiraron y ejecutaron las consignas del nazismo. «Nunca se ha expresado tan vivamente el apasionado deseo de aquella juventud de escapar de una atmósfera envenenada por los odios políticos y las pasiones sociales». Stefan Zweig

Un hijo de nuestro tiempo

$31.000,00
Un hijo de nuestro tiempo $31.000,00
Compra protegida
Tus datos cuidados durante toda la compra.
Cambios y devoluciones
Si no te gusta, podés cambiarlo por otro o devolverlo.

Isabel Hernández, Ödön Von Horváth
Un hijo de nuestro tiempo
Nórdica Libros

Páginas: 170
Formato:
Peso: 0.275 kgs.
ISBN: 9788418067211

En Un hijo de nuestro tiempo Horváth se convierte en fiel cronista de su época. Es capaz de reproducir los usos del lenguaje fascista tanto a nivel militar como civil y de mostrarnos a través de ellos cómo el individuo de a pie adopta sin más los tonos por los que ya se ha dejado seducir. Si en Juventud sin Dios el maestro tenía una sensación ambivalente respecto a ello, el soldado de Un hijo de nuestro tiempo está entusiasmado con los usos del Estado fascista y habla siguiendo el modelo ideal de lenguaje tipificado por los nacionalsocialistas. Esta novela, escrita en 1937, es un brillante retrato de aquellas personas que durante años obedecieron, admiraron y ejecutaron las consignas del nazismo. «Nunca se ha expresado tan vivamente el apasionado deseo de aquella juventud de escapar de una atmósfera envenenada por los odios políticos y las pasiones sociales». Stefan Zweig