Menú
Productos
Inicio / Catalogo / Psicologia Y Ciencia / Psicologia Y Educacion / Psicologia General / Lacan en entredicho

Eduardo Said
Lacan en entredicho
Prometeo editorial

Páginas:
Formato:
Peso: 0.3 kgs.
ISBN: 9789875749672

Elegí detenerme en este texto para su lectura comentada y crítica, tanto por su relevancia como lugar de orientación y formación en el medio lacaniano; como por que sus enigmas y encrucijadas me informaron, detuvieron y entretuvieron en muchos momentos. Asumo en ello mi propia inserción en sus contextos. De las palabras de Lacan se deducen relevantes consecuencias en la dirección de la cura. Y anticipo que en localizaciones álgidas de su posición-elaboración expreso mi disenso. Interrogo a Lacan habiendo sucumbido a alienarme primero en sus atmósferas. Lacan no resulta indiferente. Su nombre propio, llevado a nombre común, hace de pivote como para que la elaboración de disensos o consensos tenga como precondición insertarse en el alcance de sus desarrollos. Es posible que quede así la posibilidad del reconocimiento de la invención acotada a su exclusiva atribución. No se trata de amarlo, ni de odiarlo. El propio Lacan lo reclamó. Tampoco de citarlo a partir de la admiración que anula la puesta en entredicho a la que él invita. Asumo valerme de la ocasión para poner en debate mis propias perspectivas. Eduardo Said

Lacan en entredicho

$15.950,00
6 cuotas sin interés de $2.658,33
Ver medios de pago
Lacan en entredicho $15.950,00
Compra protegida
Tus datos cuidados durante toda la compra.
Cambios y devoluciones
Si no te gusta, podés cambiarlo por otro o devolverlo.

Eduardo Said
Lacan en entredicho
Prometeo editorial

Páginas:
Formato:
Peso: 0.3 kgs.
ISBN: 9789875749672

Elegí detenerme en este texto para su lectura comentada y crítica, tanto por su relevancia como lugar de orientación y formación en el medio lacaniano; como por que sus enigmas y encrucijadas me informaron, detuvieron y entretuvieron en muchos momentos. Asumo en ello mi propia inserción en sus contextos. De las palabras de Lacan se deducen relevantes consecuencias en la dirección de la cura. Y anticipo que en localizaciones álgidas de su posición-elaboración expreso mi disenso. Interrogo a Lacan habiendo sucumbido a alienarme primero en sus atmósferas. Lacan no resulta indiferente. Su nombre propio, llevado a nombre común, hace de pivote como para que la elaboración de disensos o consensos tenga como precondición insertarse en el alcance de sus desarrollos. Es posible que quede así la posibilidad del reconocimiento de la invención acotada a su exclusiva atribución. No se trata de amarlo, ni de odiarlo. El propio Lacan lo reclamó. Tampoco de citarlo a partir de la admiración que anula la puesta en entredicho a la que él invita. Asumo valerme de la ocasión para poner en debate mis propias perspectivas. Eduardo Said